Lali Espósito, ícono del pop argentino, ha demostrado ser mucho más que una artista multifacética. En una reciente entrevista, la cantante y actriz no solo habló sobre su historia familiar y los momentos difíciles que marcaron su vida, sino que también recordó con detalle sus primeros pasos en la televisión bajo la mirada de Cris Morena, la creadora de éxitos juveniles.
Sus comienzos en “Rincón de Luz” y las duras pruebas de selección
El inicio de Lali en el mundo artístico estuvo lleno de anécdotas memorables. Con tan solo diez años, se presentó a un casting de manera casi accidental. “Vi un anuncio en la tele e insistí para ir. Mi mamá no quería, pero me escapé con mi hermana. Llegamos al lugar equivocado y terminé en una prueba privada para un programa de Cris Morena”, relató.
Aunque su espontaneidad y talento natural la destacaron rápidamente, el proceso no fue sencillo. Lali recordó cómo, cada viernes, los niños esperaban ansiosos fuera del canal para saber si continuaban en la selección. “Salían y decían: ‘Marcelo, Claudia y Sofía no vienen más. A los demás, nos vemos la semana que viene’. Los padres y los chicos lloraban. Mi mamá me esperaba en el auto porque no soportaba el nerviosismo, pero yo insistía: ‘No me nombraron, mamá. Tengo que volver’. Y así seguí hasta que un día Cris Morena apareció, miró a doce nenes y dijo: ‘Ustedes son el elenco’. Yo ni siquiera entendía qué significaba la palabra ‘elenco’”, recordó con emoción.
Pese a las dificultades, para Lali el recuerdo más entrañable de aquella etapa no es la tensión de las pruebas, sino “el olor del estudio de Rincón de Luz. Cada tanto entro en un lugar y siento ese olor, y es como volver a mi infancia”, confesó con nostalgia.
La evolución de una estrella que nunca dejó de soñar
De esos comienzos accidentales, pero llenos de pasión, Lali Espósito pasó a convertirse en una de las figuras más relevantes del espectáculo argentino.
Su reciente éxito al agotar dos fechas en el Estadio Vélez Sarsfield y el anuncio de un nuevo show reflejan su conexión con el público y la solidez de su carrera.
Sin embargo, la artista también mostró su lado más humano al hablar de los desafíos que enfrentó fuera de los escenarios. La pérdida de su prima Virginia, el diagnóstico de cáncer de su madre, y su propia lucha por mantenerse fiel a sí misma son aspectos que moldearon su carácter. “Mi vida es un poco una vida viviéndose. No puedo proyectar, porque ya pasó cualquier cosa”, reflexionó.
Lali Espósito, quien inició su carrera de manera casi fortuita, ha demostrado que el talento, la resiliencia y la pasión son claves para alcanzar el éxito. Desde los estudios de Rincón de Luz hasta los grandes estadios, su camino está marcado por la autenticidad y un profundo amor por su arte.
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